Por Esther Aguirre
No sólo se han adaptado a los nuevos retos tecnológicos, sino también a hacer otras cosas, hasta ahora impensables, como elaborar boletines informativos desde casa, con sus hijos revoloteando a su alrededor. A pesar de ello, el coronavirus no ha frenado en ningún momento el “caudal” de noticias que produce EFE Radio.
Ese fue precisamente uno de los objetivos que se marcó este departamento de EFE, integrado por quince profesionales -nueve periodistas y seis técnicos-, que han afrontado con gran acierto las exigencias impuestas por la voraz pandemia, que ya se ha cobrado más de 27.100 vidas.
Los periodistas Raquel Cinca y Pablo Gómez, y el coordinador técnico Esteban Novillo forman parte de ese reducido, pero potentísimo equipo de profesionales, que se las ha ingeniado con su destreza habitual para seguir informando de esta insólita situación, unas veces (la mayoría) desde casa y otras (las menos), desde la redacción.
Y es que Televisión y Radio son los únicos departamentos de la Casa que no pueden trabajar al cien por cien en remoto; así que no les queda otra que rotar y acudir de vez en cuando a la sede principal de EFE, que, estos días lejos de su ajetreo habitual, parece más bien un edificio fantasma.
Pero volviendo a lo importante, la producción de audio no se ha resentido, aunque sí se han tenido que suprimir tres informativos, que han pasado a ser boletines. ¿Y qué se ha hecho para compensarlo? Pues poner en marcha nuevos productos: el videopodcast “Cuarentena” y el pódcast “Verifica”, con la colaboración del equipo de verificación de la agencia.
El periodista Pablo Gómez, quien en condiciones normales se encarga del informativo de las ocho de la mañana, tuvo muy claro desde el principio que la pandemia les iba a cambiar la vida, tanto personal como profesionalmente, así que empezó a idear proyectos alternativos que se pudieran hacer desde casa.
Y así es como surgió “Cuarentena”, un programa que conduce él mismo, en el que corresponsales de EFE en el mundo comentan en un tono distendido, cómo se está viviendo la pandemia en todos los rincones del planeta, lo que permite, además de aprovechar el “músculo de EFE”, dar más visibilidad a los compañeros de las delegaciones internacionales, comenta.
Aunque inicialmente nació para ser emitido en la programación de EFE Radio (a través de sus emisoras abonadas) y ser publicado en su canal pódcast, ahora también se difunde, en formato vídeo, en redes sociales, Youtube y en el envío que hace EFETV, tal y como explica este comunicador.
Igualmente, Pablo Gómez gestiona y graba junto a Desirée García, el programa ‘Verifica’, una iniciativa para transmitir en un pódcast algunos de los contenidos elaborados por el equipo de EFE Verifica, del que forman parte ésta última y Ramiro Fuente.
Por su parte, la periodista Raquel Cinca también se encarga de hacer boletines informativos diarios, ahora desde casa, y destaca el hecho de que, a pesar de que comenzaron a trabajar prácticamente “de un día para otro”, todo está saliendo “de maravilla”, incluso mejor de lo que podrían haber imaginado.
“Te das cuenta, en este tipo de situaciones, de que las nuevas tecnologías te permiten hacer casi cualquier cosa desde cualquier lugar”, afirma Cinca, antes de subrayar que se han adaptado “muy bien” teniendo en cuenta las circunstancias.
Aunque a buen seguro echa de menos el ajetreo de la redacción, la periodista, que también sustituye a menudo a los presentadores habituales de informativos, admite que le “encanta” teletrabajar con su hijo rondando por ahí, porque le permite “pasar más tiempo con su familia”. “Está siendo una experiencia enriquecedora”, sostiene.
Pero si la labor de todo el equipo es importante, la de los técnicos es crucial. Esteban Novillo, que es un veterano de la Casa, es el coordinador de los técnicos, encargado ahora, con más intensidad si cabe, de velar por el buen funcionamiento del departamento.
Y pese a haber tenido que lidiar con dificultades técnicas y haber tenido que sacrificar un poco la calidad del sonido, Novillo se queda con lo importante: “el caudal informativo no ha parado en EFE Radio en ningún momento”. “Hemos salido adelante (y con solvencia) de una situación inédita”, añade.
Una experiencia que, con toda probabilidad, trasladará a sus alumnos del Máster de EFE este enamorado de las ondas y de la radio, medio en el que lleva más de 35 años, y que en sus ratos libres también realiza el podcast musical Cloud Jazz, que tiene más de un millón de descargas anuales.
El director del departamento, Roberto Castañares, por su parte, defiende sin complejos el potencial de EFE Radio, del que destaca su papel como servicio público, y pone como ejemplo un sólido argumento: damos cobertura a gran parte de las emisoras que están en zonas sin la oferta radiofónica de las grandes ciudades y no tienen capacidad para atender las necesidades informativas de su audiencia.
“Son empresas que, por una u otra razón, no quieren depender de los intereses de las grandes corporaciones de radio españolas y prefieren mantener su independencia”, comenta el periodista. “Acuden a EFE porque conocen su estilo y lo aprecian”, apostilla.
En cuanto a los retos de EFE Radio, Castañares lo tiene claro: “sumergirnos más y mejor en el mundo pódcast”, lo que incluye desarrollar y adaptar formatos para que encajen en los diferentes servicios de EFE, incluidos los de América, y conseguir más abonados para recuperar ingresos por publicidad y patrocinios.
Y una vez dicho todo esto, si hay algo en lo que todos coinciden es en la capacidad de adaptación de todo el equipo, a la hora de sortear las consecuencias de esta terrible pandemia, y en agradecer el trabajo del departamento de Tecnología, sin el cual hoy no estaría teletrabajando más del 90 por ciento de los empleados.