6.1 Nuestro ADN

La naturaleza y la dimensión de EFE no siempre es bien conocida. En aras de un mejor entendimiento acerca de su actividad y penetración en el mercado informativo, la Agencia ha actualizado todos sus datos para conocimiento del público general.

Somos una Agencia pública que rinde cuentas ante el Parlamento, el Tribunal de Cuentas, IGAE y la Comisión Europea, y que cumple internamente con un estricto Código Ético y un protocolo de actuación en la obtención y edición de la información, bajo decisiones colegiadas.

Este control de calidad interno está avalado, además, por el Consejo de Redacción, un órgano de representación profesional de los periodistas de la Agencia que regula las actuaciones informativas de la Redacción a través de un Estatuto, que fue aprobado el 18 de mayo de 2006, por lo que cumple 17 años. En esta presentación se ofrece las principales cifras de los últimos meses.

En 2023 hemos actualizado el canal ético adaptándolo a la ley 2/2023, de 20 de febrero, reguladora de la protección de las personas que informen sobre infracciones normativas y de lucha contra la corrupción, reflejo del compromiso con nuestros valores de transparencia y Buen Gobierno y nuestro principio de cumplimiento de la legalidad y la ética como guía de todas nuestras acciones.

6.2 Nuevo libro del estilo urgente

La Agencia EFE renovó su manual del estilo después de 13 años, en una nueva obra titulada “Nuevo libro del estilo urgente”, coordinada por el periodista Javier Lascuráin.

Hace ya mucho tiempo que los manuales de estilo surgieron en los medios de comunicación para dotarlos de una voz propia, de un modo particular de contar, de una personalidad definida.

En ellos suelen abordarse cuestiones profesionales (la extensión de las noticias, el modo de editarlas y presentarlas…), éticas (la atribución de la información a las fuentes, los límites de la información…) y propiamente lingüísticas (normas ortográficas y gramaticales, formas preferidas…).

Concebidos como herramientas internas de trabajo, con frecuencia han despertado el interés del público y se han editado como libros al alcance de todos los lectores.

Fue el caso del Manual de español urgente de la Agencia EFE (hoy transformado en el “Nuevo Libro del Estilo Urgente”) que fue pionera en la adopción de este tipo de directrices: publicó sus primeras normas de estilo en 1975 cuando ya cientos de periodistas nutrían sus líneas desde
los cinco continentes empleando el español de España, pero también el de México, Argentina, Colombia, Cuba y tantos otros países.

Eran entonces una treintena de folios mecanografiados que muy pronto se convirtieron, de la mano del académico Fernando Lázaro Carreter, en una obra que no tardó en ser una referencia para profesionales y estudiantes de periodismo y que desde entonces se reeditó decenas de veces.

A lo largo del tiempo transcurrido desde aquellos años, pocos son los grandes medios de comunicación en español que no han editado sus propios libros de estilo.

El Nuevo Libro del Estilo Urgente recoge las normas éticas, profesionales y lingüísticas que rigen el trabajo informativo de la Agencia EFE. Más allá de su utilidad interna, esta obra ofrece esas pautas a todos aquellos profesionales de otros medios, docentes y estudiantes de comunicación que compartan los principios fundamentales de EFE: el rigor, la claridad y la precisión informativa; la contextualización, la verificación, la honradez y, por supuesto, el respeto máximo a los protagonistas de la información y a
los ciudadanos a los que va dirigida.

Con su conocida vocación de servicio público, EFE puso a disposición de todo el mundo, de manera gratuita, la versión digital de este libro, descargable en su página corporativa (www.agenciaefe.es) , desde comienzos de 2024.

Su presentación oficial arrancó los actos conmemorativos del 85
aniversario de la Agencia, que este año (el pasado 3 de enero) cumplió 85 años de historia.

Así, con motivo de este aniversario, a finales de ese mes, el 30 de enero, EFE depositó en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes sus códigos de identidad, las normas básicas y los criterios lingüísticos y éticos que sus profesionales han seguido día a día para contar los acontecimientos del mundo, desde la agencia que echara a andar.

Desde ese final de enero de 2024 la cámara acorazada del Instituto Cervantes, que encierra secretos y símbolos de escritores y artistas de la cultura hispánica, atesora también los manuales de estilo de la principal agencia de noticias en español y algunas de las fotografías más reconocibles de la historia de España, las que hizo EFE en el intento de golpe de Estado del 23F en 1981.

Buena parte de este legado fue depositado por el presidente de la agencia, Miguel Ángel Oliver, bajo la atenta mirada del director del Cervantes, Luis García Montero, que consideró el trabajo de EFE “cada día más necesario como el aire que respiramos” por su “honestidad”, “fiabilidad” y “rigor”.

Especialmente en estos momentos porque, según ha dicho, “en época de inundaciones lo primero que escasea es el agua potable, y en época de sobreabundancia informativa, como la que vivimos, lo primero que escasea es la información veraz”.

Ese día se abrió la Caja de las Letras, según García Montero, a “un referente periodístico” que, a su juicio, ha sabido detectar “los peligros de la posverdad” y la irrupción de la inteligencia artificial en “una sobreabundancia informativa que acecha a nuestros sistemas democráticos”.

En la necesidad de credibilidad por parte de los medios también incidió Oliver, orgulloso de que esta especie de ‘cápsula del tiempo’ se haya abierto para guardar el “Nuevo libro del estilo urgente”.

El manual, coeditado con el Cervantes, ha contado con la coordinación ejecutiva del periodista de EFE Javier Lascuráin, quien explicó que el libro es muy nuevo, como indica su nombre, pero también antiguo porque es heredero de una larga tradición de textos de estilo de la agencia, que fue pionera en este tipo de obras.

Un legado “vivo y útil” para la sociedad -precisó-, en cuyas páginas se reescribe el “Libro de estilo urgente”, de 2011, coordinado por el también exdirector de Información y de Internacional de EFE Emilio Crespo, quien depositó también una memoria extraíble con la web “EFE hace historia”, donde se recoge en digital la historia de la agencia.

La Caja de las Letras, esta especie de “cámara sagrada”, le permitió fantasear a Oliver, gran amante de la arqueología, con el “tesoro de palabras y de imágenes” que EFE entregó para la posteridad.

“Es el tesoro humano del lenguaje, el que define a la humanidad. Aquí dejamos nuestros códigos”, comentó Oliver, quien depositó el manual de estilo editado en 1978, días después de que se aprobara la Constitución.

Introducción al Nuevo Libro del Estilo Urgente

El Nuevo libro del estilo urgente recoge las normas básicas de la actividad informativa de la Agencia EFE en sus aspectos éticos, profesionales y lingüísticos.

En el año 2011, EFE publicaba su Libro de estilo urgente, un manual periodístico que redactó y coordinó el periodista de EFE Emilio Crespo y que aportaba, por primera vez, un enfoque multimedia del trabajo en la Agencia y recogía los principios básicos de un Estatuto de Redacción que sus profesionales habían aprobado por amplia mayoría en 2006.

Ahora, doce años después de aquella publicación, este Nuevo libro del estilo urgente es, como no podía ser de otro modo en un mundo tan cambiante, algo más que una mera revisión de su predecesor. Sobre la base de aquel trabajo, del que mantiene sus principales contenidos originales, el nuevo libro adopta una estructura distinta, revisa y reescribe buena parte de su material e incorpora multitud de aspectos que han aparecido o cobrado importancia en los últimos años en las redacciones de EFE y de todos los medios de comunicación, desde las redes sociales a la inteligencia artificial pasando por el lenguaje inclusivo o los contenidos patrocinados.

El libro se estructura en tres partes principales (aspectos éticos y deontológicos, producción de contenidos y lenguaje) a las que se añaden dos anexos.

Aspectos éticos y deontológicos

En esta primera parte se desarrollan los principios que ya aparecen en el Estatuto de Redacción y que constituyen los compromisos de la Agencia de cara a sus clientes y a la sociedad para la que trabaja. Incluye indicaciones sobre el tratamiento de asuntos de especial sensibilidad (suicidio, salud mental, violencia machista, inmigración, racismo y xenofobia, diversidad…) y el necesario enfoque de género en todas nuestras informaciones. Regula además los posibles conflictos de interés de sus profesionales a la hora de ejercer el periodismo y aporta principios básicos sobre la inclusión de contenidos patrocinados en las líneas informativas. En otro de sus apartados recoge orientaciones básicas sobre el uso de inteligencia artificial y contenido generado automáticamente, uno de los asuntos que más preocupan en las redacciones en los últimos tiempos.

Producción de contenidos

La segunda parte del libro, la más amplia, aborda las prácticas profesionales de la Agencia: cómo obtenemos, manejamos, elaboramos, editamos y publicamos nuestro contenido. Abarca tres capítulos del libro, que se dedican a las tres fases fundamentales de ese proceso. Constituye una garantía de calidad de nuestros productos y de orden de nuestros servicios. Este capítulo enumera las pautas generales de ese proceso y su aplicación a los contenidos de texto, gráficos, de vídeo y multimedia. Añade algunas pautas sobre posicionamiento SEO y sobre la importancia del correcto metadatado de todas nuestras informaciones en todos los soportes.

Captación

Cómo seleccionamos la información en un mundo hiperinformado; cómo manejamos y nos relacionamos con las fuentes; cómo abordamos las coberturas informativas desde las ruedas de prensa a los comunicados y documentos, las manifestaciones, los procesos electorales o los conflictos y situaciones peligrosas… Además, se establecen las líneas básicas a la hora de citar a otros medios, de informar o referirse a la propia Agencia y se regula cómo y bajo qué límites utilizamos material no obtenido por nuestros propios profesionales (cedido por empresas o instituciones o generado por usuarios).

Redacción

Tras algunas notas generales comunes a todos los servicios y productos (enfoque multimedia, claridad y concisión como marcas de estilo…), se desglosan las indicaciones para cada soporte:
texto (titulares, extensión, géneros, urgentes y avances, avisos…), foto, vídeo (brutos, editados, vivos…), audio (pódcast, directos), infografía, páginas web, redes sociales, alertas para móviles, agenda digital… Este capítulo incluye indicaciones sobre el manejo de datos en las noticias, la verificación como parte del trabajo diario de todos nuestros periodistas, pero también como formato específico y notas sobre ciertos tipos de información especializada (judicial,económica, deportiva…).

Edición y publicación

La edición es, en una agencia, una fase clave del proceso informativo; la que va desde la obtención y elaboración de una información por alguno de nuestros periodistas a su publicación y entrega a los clientes.

Captación

Cómo seleccionamos la información en un mundo hiperinformado; cómo manejamos y nos relacionamos con las fuentes; cómo abordamos las coberturas informativas desde las ruedas de prensa a los comunicados y documentos, las manifestaciones, los procesos electorales o los conflictos y situaciones peligrosas… Además, se establecen las líneas básicas a la hora de citar a otros medios, de informar o referirse a la propia Agencia y se regula cómo y bajo qué límites utilizamos material no obtenido por nuestros propios profesionales (cedido por empresas o instituciones o generado por usuarios).

Redacción y elaboración

Tras algunas notas generales comunes a todos los servicios y productos (enfoque multimedia, claridad y concisión como marcas de estilo…), se desglosan las indicaciones para cada soporte: texto (titulares, extensión, géneros, urgentes y avances, avisos…), foto, vídeo (brutos, editados, vivos…), audio (pódcast, directos), infografía, páginas web, redes sociales, alertas para móviles, agenda digital… Este capítulo incluye indicaciones sobre el manejo de datos en las noticias, la verificación como parte del trabajo diario de todos nuestros periodistas, pero también como formato específico y notas sobre ciertos tipos de información especializada (judicial,económica, deportiva…).

Edición y publicación

La edición es, en una agencia, una fase clave del proceso informativo; la que va desde la obtención y elaboración de una información por alguno de nuestros periodistas a su publicación y entrega a los clientes.

El lenguaje

El tercer gran bloque es el dedicado al lenguaje, al buen uso del español, uno de los compromisos históricos y actuales de la Agencia EFE.

Muchos libros de estilo de medios de comunicación incluyen en este apartado largos diccionarios de términos o expresiones, pero EFE ya cuenta con una herramienta imbatible para esa labor: la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE), en cuya página web están resueltas casi todas las dudas que pueden asaltar a las redacciones en su tarea diaria y a la que remite este libro.

No obstante, y para facilitar su consulta, se han reunido en ese capítulo algunas decenas de las dudas o errores más frecuentes detectados en las mesas de edición (cuestiones de gramática, léxico y ortografía), con enlaces a las correspondientes recomendaciones de la Fundéu. Se añaden algunas indicaciones ya clásicas sobre el modo de escribir nombres, cargos y tratamientos, siglas, números, medidas, monedas…

Además, se dedican apartados específicos a tres asuntos que suelen generar dudas en las redacciones. El primero de ellos es el del lenguaje y el género, un asunto poco menos que ineludible en una obra de este tiempo. En ese campo y, por resumirlo al máximo, la postura de EFE es (como no puede ser de otro modo), respetar la doctrina académica que señala que en español el masculino actúa como género no marcado y sirve por tanto para aludir a hombres y mujeres en muchos contextos (los ciudadanos, los alumnos…). Pero el hecho de que el masculino pueda actuar de ese modo no nos obliga a hacerlo siempre. Por eso el libro aporta estrategias y propuestas (todas ellas perfectamente válidas y conformes a las normas del español) para evitar su uso abusivo y contribuir a una mayor visibilización de lo femenino.

El segundo de los temas es la presencia de extranjerismos en nuestras informaciones y recoge una lista (necesariamente incompleta, pero útil como primera aproximación) con un centenar de los más habituales y las alternativas o adaptaciones que propone para cada uno de ellos la FundéuRAE.

Por último, el libro trata de unificar la escritura de topónimos, un asunto nada sencillo en una agencia que informa desde todo el mundo y para clientes de todo el planeta. En ese sentido se ofrecen pautas para la transcripción de nombres procedentes de lenguas que usan otros alfabetos (chino, árabe, ruso…), y para el uso de aquellos que sí emplean el alfabeto latino, pero con caracteres y diacríticos distintos a los del español (portugués, alemán, francés, catalán…).

Por último, establece criterios sobre los topónimos de las comunidades autónomas españolas que cuentan con una lengua cooficial además del castellano.

Los anexos

El libro se completa con dos anexos. El primero de ellos recoge una serie de indicaciones sobre las implicaciones legales de la actividad periodística, que ya figuraba en el libro de 2011.

Entre otras aportaciones, incluye una muy interesante escala del mayor o menor riesgo en el que puede incurrir un periodista y su medio al publicar ciertas informaciones en función del tipo de protagonista, la clase de acusaciones que pueda contener y las fuentes en las que se basa.

Un segundo anexo establece la necesidad de revisar y actualizar de forma permanente esta obra para, sin perder la esencia de sus principios como empresa pública, adaptarse siempre a las dinámicas de trabajo de la propia agencia y a las necesidades de sus clientes.

El sitio de norma y estilo

La publicación de este Nuevo libro del estilo urgente coincide con la puesta en marcha de un sitio interno de norma y estilo, accesible solo a los profesionales de EFE, y del que constituye su eje principal.

Además de los principios generales recogidos en este Nuevo libro del estilo urgente, una empresa como EFE, primera agencia de noticias del mundo en español, con presencia en 180 ciudades de 110 países y con multitud de departamentos que hacen muy diferentes productos en decenas de ubicaciones repartidas por los cinco continentes, necesita indicaciones, guías o normas más detalladas que afectan en ocasiones a un único producto (las guía sobre el uso de la agenda, para la elaboración de paquetes multimedia, la creación de vídeos rotulados…). El sitio de norma y estilo recopila y ordena esos documentos de modo que sean accesibles fácilmente para cualquier profesional de EFE que los necesite y puedan actualizarse de forma continua.